Hola Fer:
No sabes cuantas veces el leer algún post de tu página me ha ayudado a seguir con mi vida, a darme ánimos para ser mejor persona siempre. Y me da mucho gusto de que haya gente como tú. Me está pasando algo que pensé podría solucionar por mis fuerzas, pero necesito varios puntos de vista.
Resulta que hace un par de meses fui a una ciudad en provincia por motivo de trabajo. Como estaba lejos de casa y de todo lo que conocía en Lima sólo podía dedicarme al trabajo y a hacer cosas que no se podía en casa por motivo de tiempo (como ir al gym). Al mes decidí ver como estaba el ambiente gay en esta ciudad, entré a una de tantas páginas y logré contactar con un pata que antes de que nos veamos me advirtió que no buscaba atarse a alguien, que sólo quería pasarla bien y listo. Como yo estaba solo por dos meses y ante la soledad que se hacía notar cada día más, acepté sus términos. Nos encontramos en la plaza principal y lo primero que hicimos fue conversar. Yo tengo 25 años y él 40. Ahí me enteré que era casado, con dos hijos, que sólo le gustaba mirar hombres y fantasear un rato con ellos, y que después de que la calentura y arrechura se le pasara, el volvía a ser "normal". Como si nada pasara. Le pregunté entonces que palabra era la que lo definía (el pregunto primero si era pasivo o activo), a lo que me dijo que no sabía, que de repente era un curioso, o un bisexual, pero que gay definitivamente no era.
Me contó cosas de su infancia que creo influyeron en lo que él siente y es ahora, pero no quise indagar más ya que sólo era una noche con él y luego no lo volvería a ver. Pero ese día apenas fuimos al hotel donde estaba hospedado y nos besamos y nada más. Es un hombre muy tenso y eso fue lo único que pudimos hacer. Prometimos volvernos a ver para ver si pasaba algo más. Pasado los días seguíamos comunicándonos por sms y nos vimos un par de veces más, llegamos a acostarnos, salimos a comer, a seguir conversando, todo como patas.
En uno de esos días, como él me escribía al celular seguido, le dije por sms que me regresaba a Lima por unos días, él me dijo que tenía que cuidarme porque estaba a punto de resfriarme y textualmente le dije: "Quería decirte que la paso muy bien contigo .. Gracias". Yo pensando siempre en ser algo detallista como él que siempre escribe, a lo que me responde: "Nada que agradecer, es mutuo. Lástima que no sea al 100%, eres un pata bacán". Yo primero me quedé estúpido, quizá yo me estaba insinuando, y aunque era cierto que me hubiera gustado tener algo con él, tenía bien en claro sus reglas de juego. Pero torpemente me di esperanzas y decidí intentar que pasara algo.
En los días que me quedaban en esta ciudad quisimos vernos más tiempo, pero por su trabajo y por el mío (aparte sus responsabilidades como padre y esposo) apenas nos llegamos a ver una vez más si no me equivoco. Un día me mando un mensaje diciendo que le gustaría conversar sobre "ese" tema pendiente, pero no fue hasta en Lima que pudimos conversarlo. Yo me regresé definitivamente y él se venía a Lima por fiestas patrias a pasar dos semanas y su casa estaba a tan solo cuatro cuadras de mi lugar de trabajo en Lima.
Ahí pudimos conversar y lo noté más frío que antes, ese mismo entusiasmo que había mostrado en los mensajes se había ido. Sobre "ese" tema pendiente me dijo que si, se confundió un poco porque no había conocido alguien como yo, que pensaba diferente de la gente gay, siempre se había acostado con hombres pero luego no los veía y no llegaban a ser amigos como nosotros, y quizá eso haya hecho que se sienta bien estando conmigo y así confundir lo que sentía o lo que quería. Que por último le bastaba con una paja pensando en un hombre y una vez que se le pasaba, solucionada la calentura. Por mi parte le dije lo que pensaba, que tenía todo mi cariño y amistad, que lo veo con otros ojos y que si, me hubiera gustado algo serio con él. Incluso en la conversación (como debo haber estado) me dijo que me brillaban los ojos cuando le hablaba. Si le agarré bastante cariño, y como a todos mis amigos, me hubiera gustado ayudarlo a lograr sus metas personales (quería conocer las playas del norte, continuar con unos estudios, etc.).
Como pareja, me hubiera gustado que pasara de todo. Me sentí como un tonto, el ya había puesto las reglas del juego y prometí que no pasaría nada, pero de quien fue la culpa? Me hice ilusiones en vano. Qué clase de hombre es él que, o no se asume, o le gusta divertirse con hombres como fantasía, o de verdad es bisexual o curioso? Incluso sugirió que yo debería buscar a una mujer para no estar sólo, que a lo mejor me gustaba. No es eso ser totalmente deshonesto contigo mismo y hacer daño a los seres que supuestamente más amas? Tu familia tiene que pasar por eso y verse afectados si alguna vez se descubre tal engaño y deshonestidad? Llevar una doble vida? Alardear de ser bien macho y decir que uno se acuesta con mujeres, para luego verte a escondidas y disfrutar sentir el cuerpo de otro hombre (el mismo lo dice)?
Me sentí bastante confundido y creo todavía albergo la esperanza de que recapacitará y podremos tener algo. No se dio esos casos en donde el "hétero" se aprovecha del gay con respecto a dinero (le ofrecí ayuda de un prestamos para comprar algo para su hijo, el cual consideró pero no se llego a dar y no lo quería aceptar de mi de todos modos, no es su estilo aprovecharse de sus "amantes").No sé qué pensar, trato de olvidarlo, pero verlo casi a diario por Facebook me recuerda mucho a él (y eso que ya no le hablo) y estoy seguro que se está dando encontrones a escondidas con algún pata (y quizá lo que siento sean celos). Debo insistir o lo dejo ahí?
Sé que la gente seguidora de tu página va a comentar y podré tomar mis propias decisiones. A la espera de un poco de ayuda.
Enrique